Después de que Prentiss y Reid fueran encubiertos a Colorado para investigar un presunto abuso infantil cometido por el lider de una comunidad cristiana-fundamentalista (Luke Perry) en el recinto del culto subterráneo en La Plata County, se encuentran retenidos como rehenes en una redada, dirigida por la Policía del Estado, que termina yendo desastrosamente mal.