Kisame es derrotado por Guy y es llevado a un interrogatorio, en el cual entran a su mente, donde se develan misterios sobre su vida y su forma de vivir, también como conoció a Madara y como este controlaba a Yagura. Ante eso, el Akatsuki no reveló más información, ya que se muerde la lengua y se suicida utilizando sus propias invocaciones. Cuando se abre el pergamino de Kisame, este resulta ser una trampa, dejándolos atrapados dentro de las prisiones de agua, mientras que un tiburón invocado toma el rollo con la información de la isla y toma gran distancia. Mientras es devorado, Kisame recuerda a Itachi y su forma de ver el mundo.