El nuevo dueño de El Montecito, A.J. Cooper se presenta al resto del equipo como el nuevo jefe y el lema que trae consigo es: “Puede pasar cualquier cosa”. El equipo está preocupado porque Cooper ha notificado que algunos de los trabajadores van a ser despedidos. Por su parte, Sam está visitando a un psicólogo para lograr superar el secuestro que ha sufrido, pero no le resulta fácil sincerarse con el médico y en lugar de hablar de sí misma y del incidente del secuestro, solo habla de sus compañeros. Además, en el Casino hay un "cuentacartas" que está ganando mucho dinero, los chicos de seguridad lograrán descubrirlo.