Romero, en su alianza forzada con Vicente, trata de ayudarlo a localizar al Tato antes de que lo encuentre Verónica. El juez también tiene una fuerte discusión con Álex, que busca refugio en casa de Alba. Los dos jóvenes terminan por besarse ajenos a que Pilar sabe que Álex es el hijo de Romero, al que cree culpable del atropello de Hugo.