Caterina, la madre de Federico, es la principal sospechosa en un caso de intento de asesinato: una trágica noticia de su adolescencia la vincula inevitablemente con la víctima aunque ella siga declarándose inocente. Don Massimo decide indagar en el pasado de la mujer en busca de la verdad, mientras que hasta Federico ha dejado de creer en su madre. El coronel Anceschi regresa a Spoleto para saludar a su hija Valentina y conocer a su nuevo novio.