Cordell recibe el soplo de que Grey Flag podría seguir teniéndole como objetivo principal. Mientras tanto, el capitán James descubre que Cordell y Cassie no eran sinceros sobre cierta información de alto secreto y la implicación de Trey en el caso de la semana anterior le mete en un buen lío. Abeline y Bonham discrepan sobre lo preparado que está Cordell para asumir sus responsabilidades, mientras que Liam sigue adelante con su nueva aventura empresarial, a pesar del disgusto de su padre por el nuevo socio de su hijo.