Llega la Semana Santa de 1969 con sus procesiones, saetas y torrijas. Don Severiano explica a sus alumnos el significado de la Semana Santa, lo que hace que Carlos, Josete y Luis lo toman al pie de la letra y deciden sufrir como penitentes, no jugar con las chicas y, además, ser mártires a su manera. Marta decide romper con Toni y este último se queda destrozado.