La Célula Hashirama se extrajo del cuerpo del Primer Hokage Senju Hashirama y, dependiendo de cómo se maneje, su poder para estimular la energía vital en proporciones explosivas la hace extremadamente peligrosa. Boruto y los demás se enteran de que la celda está en manos de una persona adinerada que vive en el castillo de Fushuu y planean recuperarla. Pero hay otros que también lo buscan.