El detective Kennex y Dorian investigan a Simon, un asesino psicópata que fija bombas al cuello de sus víctimas y retransmite sus momentos finales a través de Internet. Cuando Simon elige como víctima a Kennex, el equipo se encuentra en una carrera de infarto contra el tiempo para salvar su vida. Mientras tanto, un fallo de energía afecta a Dorian, lo que le hace tener arrebatos inesperados.