Los militares han secuestrado al hombre misterioso, el único capaz de reconstruir la máquina, y están rodeando el colegio de minas antipersona. Está claro que no pretenden salvarles sino dejarles morir a todos, exterminarlos. Lucia cree haber encontrado la forma de fabricar más medicinas pero la fórmula implica sacar sangre a Paula y Marcos se niega en rotundo Aunque no han parado de buscarle, Curro sigue sin aparecer. Tarde o temprano tendrá que volver al colegio, a por comida o a por Amaia… La joven está aterrada. Lucas intenta digerir la muerte de su madre.