En un barrio peligroso de Granville, Kansas, tratando con maleantes para frenar el ascenso de Jonathan Kent al senado, Lex es disparado en dos ocasiones mientras intentan robarle el coche y cae en coma. En su experiencia cercana a la muerte, Lex sueña que es un hombre normal y querido en Smallville, y que sus mejores amigos son Jonathan y Clark. Además, sueña con ser de clase media y estar con una embarazada Lana y su hijo Alexander.