Inokuma tiene la intención de interrumpir a Chihaya y evitar que se divierta, pero después de ver a su hijo golpeando cartas desde un costado, decide jugar fiel a sí misma, que era divertirse, y sonríe. Chihaya le devuelve la sonrisa. Arata pierde ante Hiroshi, para sorpresa de los espectadores, dejándolo enfurecido consigo mismo. Harada-sensei luego pierde ante Murao, dejando a cada sociedad con una victoria.