"La lógica debe proporcionar la estructura dentro de la arquitectura perfecta del pensamiento, pero la inspiración surge de la emoción”. Contemplaciones sobre percepción, Anaiis Milan, año 8012 Beka está en el planeta Birrin. Birrin está rodeado por un campo de asteroide con el alto contenido de hierro y de plomo, que interfiere con sus comunicaciones con la Andrómeda. Dylan y Trance bajan en un caza estela para comprobar que ella está bien. Mientras tanto, Beka no tiene ninguna suerte localizando a los habitantes del planeta. Oye un ruido y va a investigar, pero se encuentra a uno de sus lanceros, infestado por huevos magog. Ha de dispararle y matar a los huevos pero un grupo de magogs los atacan justo cuando llega Dylan y los lanceros restantes han muerto. Todos se preguntan por qué los magogs están en Birrin, y especulan que pueden extraer los recursos del planeta. De repente aparece en el horizonte la nave satélite magog, y aunque más pequeña que la nave mundo que ya conocían es dos veces más grande que la Andrómeda. Más magogs los ataca. Rommie mientras tanto detecta la nave satélite magog y naves de guerra, pero recordando su anterior encuentro con ellos decide abrir un portal de estela. Harper trabaja sobre algunos sistemas en la cubierta de mando, pero es el único disponible para pilotar, como nadie contesta la llamada de Rommie, entonces él toma el timón. Aunque protesta que está desentrenado y el vuelo es bastante accidentado. Rhade es incapaz de contestar a la llamada de Rommie, porque está pegado al techo ya que los campos de gravedad en los pasillos, no se sabe la razón, han sido invertidos. Cuando Andrómeda sale de la estela, los campos vuelven a la normalidad. Dylan, Trance, y Beka rechazan a los magogs pero ven que sus avances recientes tecnológicos son desconcertantes. Regresan a la Andrómeda en la Meru, pero la nace ya no está. Trance rápidamente analiza las ruinas, asegurar que la nave no fue destruida, pero los magogs empiezan a atacar la nave…