Enrique VIII cuenta ahora con un nuevo e importante aliado: Carlos V, el hombre más poderoso de Europa y sobrino de su esposa Catalina de Aragón. Con el fin de proteger una alianza tan significativa para el papel de Inglaterra en Europa, Enrique intenta que Carlos no descubra la relación tan fría que existe entre él y la Reina. Sin embargo, los asuntos del corazón consiguen desestabilizarlo cuando se encuentra cara a cara por primera vez con Ana Bolena.