El quinto caso sucede en 1991. El reparto habla de esa época entre comida y frases de otro tiempo. Una ambulancia y un coche de policía acuden a los apartamentos. Gente empieza a echar espuma por la boca y a desplomarse, y los vecinos se ven afectados. ¿Es uno de ellos el responsable? Tras realizar deducciones equivocadas, tienen una última oportunidad. ¡Pero deben correr! ¡Empieza la persecución!