Woo-hyeol no puede evitar reaccionar ante la sangre de In-hae y se siente atormentado por su instinto vampírico. Decide alejarse de ella para no hacerla sufrir, pero, antes de irse, quiere encontrar al padre de In-hae. Woo-hyeol rechaza a Hae-won y Do-sik le ordena a Man-hui que lo capture.