Homero, tío de Leonardo y tan interesado como él, realiza planes para que Alberto sea arrestado por narcotráfico de camino a México y condenado a veinte años de cárcel. Mientras tanto, Leonardo se casa con Florencia y la anima a impugnar el testamento debido a la ausencia del heredero principal, y así ella se convierte en dueña de todo, pero solo de nombre, porque es Leonardo quien se ocupa de todo en la finca.