Para huir de su precaria situación familiar, Christiane se hace amiga de Stella. Gracias a ella conoce a un variopinto grupo de amigos inadaptados que olvidan sus penas bailando y bebiendo juntos en el SOUND. Fundidos en la euforia del club, se pierden en la música y se evaden juntos de la realidad. Es el principio de una gran amistad.