Carrie tiene una especie de crisis de identidad después de que la propongan participar en un espectáculo caritativo en el que tomarán parte gente real y modelos. Por el contrario Samantha que representa el otro lado del asunto, no tiene ningún vergüenza en mostrar su cuerpo y planea, incluso, hacerse fotos desnuda. Por otro lado, Charlotte descubre que tiene “vulvodonia” y que se va a ver obligada a tomar antidepresivos no para su cabeza, sino como remedio para sus dolores vaginales.