Inmediatamente después de la extraña y brevísima Tercera Guerra Mundial, están empezando a manifestarse las extrañas consecuencias de un accidente nuclear: un embarazo de 17 meses y, sobre todo, extrañas mutaciones entre los supervivientes, que se convierten en loros, armarios o incluso en una sala de estar con cama como le ha ocurrido a Lord Fortnum (Ralph Richardson). (FILMAFFINITY)