La única esperanza de libertad para dos presos evadidos pasa por asumir la identidad de los propietarios de una destartalada furgoneta que roban en su huida. Se tendrán que hacer pasar por una pareja gay de productores de desfiles de belleza a los que se espera en la pequeña población de Happy, en mitad de Texas. Allí serán tratados como reyes, ya que los habitantes de Happy están desesperados por lograr que las jovencitas del pueblo consigan clasificarse para optar al título del desfile. Happy se convertirá en terrero abonado para los embaucadores.