Exteriormente, Monsieur Victor parece ser un ciudadano modelo. Respetable comerciante de Tolón, tiene una esposa devota y es cortés y considerado con todos los que lo conocen. Sin embargo, bajo este barniz de respetabilidad se esconde un notorio receptor de bienes robados, que comercia con criminales empedernidos. Víctor logra mantener su doble vida sin ninguna dificultad hasta el fatídico día en que uno de sus cómplices amenaza con exponerlo. Temiendo un escándalo, Víctor mata al ladrón en un momento de pánico, utilizando una herramienta de zapatero. Naturalmente, el asesinato se atribuye a un zapatero local, que es condenado a diez años de trabajos forzados. Siete años después, el ex zapatero reaparece en Toulon, tras escapar de prisión. La primera persona que lo reconoce es el señor Victor...