Penny vuelve a su hogar para el Appleton Show, destacado por su célebre carrera de papas, solo para descubrir que el premio para los hombres supera ampliamente al de las mujeres, provocando su indignación. Decidida a luchar por la igualdad, se embarca en una misión para cambiar esta disparidad y enfrentar las tradiciones anticuadas, demostrando que la competencia y el reconocimiento deben ser iguales para todos.