Diez años después de su separación, Julia y Germán se encuentran en la carretera a diez kilómetros de la casa donde vive él hace un tiempo. Llueve a cántaros. A Julia no le prende la camioneta. Germán la invita a conocer su casa y a partir de ahí comenzará una noche cargada de nostalgia y reproches, de dolor e ilusión y juntos comprobarán que ya no son los mismos.